'Los MCs somos tu periódico a través del rap' decía Juaninacka, bien, entonces
El Coleta es la hemeroteca.
La otra cara de la nostalgia ochentera, la cruz. La cara de una España. Y de la otra.
De
La estanquera de Vallecas a
Balada triste de trompeta.
De
Lorca a
El Fary.
De
Juanito a
Mijatovic.
De calorros a jevis.
Con el personaje cada vez más perfeccionado, con mejores rapeos y usando/abusando de los sampleos flamencos, El Coleta repasa los últimos 40 años de la España más negra con tres referencias por rima, lo cual exige al oyente un ejercicio de memoria casi opuesto al ejercicio de imaginación que le exigen otros pseudogangsters.
Durante
"Yo, El Coleta" expone a nuestros antihéroes y enemigos públicos sin apenas juzgarlos. Mención aparte para el himno instantáneo
"Contad los muertos", seriedad absoluta, profundo como el sampleo de
Deep Purple.
No habla un lenguaje universal, habla un lenguaje local, por eso ha trascendido la escena hip-hop y sus conciertos se llenan de personajes de otros ámbitos.
El Coleta es
Die Antwoord en castellano, no hay nada casual, todo está planeado, solo hay que ver lo cuidado de los numerosos videoclips que ponen la imprescindible imagen al producto (de la tierra).
Dale Coleta, dale caña.